lunes, 31 de marzo de 2014

540 minutos para soñar

Cientos de sensaciones acabaron dentro de mí tras el partido de ayer contra Tottenham. Cientos de sensaciones que jamás había experimentado en mis 23 años de vida (como dije en mi primera entrada, Liverpool ganó su última Liga meses antes de mi nacimiento) y que me llevaron a un estado de felicidad que aún permanece, 14 horas después del fin del encuentro, y que seguirán a lo largo de la semana, por lo menos hasta el próximo domingo, día en que visitamos Upton Park.

"¿Quiere sentihla en el pesho?"
No ha sido un buen fin de semana para Tito Mou
El fin de semana comenzó de la mejor manera posible, ya que Chelsea perdió en casa de Crystal Palace (quien se juega la permanencia) y Arsenal arrancó un empate de su partido contra Manchester City, teniendo lugar el mejor resultado posible. Ese reparto de puntos permite que la Premier League pueda depender 100% de nosotros mismos, no de los Citizens. La presión podía jugar una mala pasada al recibir a Tottenham, club que está teniendo una temporada terrible y que no parece tener síntomas de mejora. No parecía ser un conjunto que nos pudiera poner en un aprieto, aunque nunca hay que subestimar a cualquier rival.

El camino para alcanzar la gloria se está construyendo
A pesar de ello, nada más comenzar el partido se pudo comprobar lo que iban a ser el resto de 90 minutos. Y no pudo empezar mejor, al introducir Kaboul un balón en su propia portería a los 2 minutos de partido, tras una excelente jugada de Glen Johnson. Ayer el lateral derecho de los Reds jugó fenomenal, subiendo durante los 10 primeros minutos más que en todo el partido anterior ante Sunderland, llevando peligro constante en cada una de sus subidas. Con el encuentro recién iniciado y ya con resultado de 1-0 a favor, no podía ser mejor, aunque había que cuidar que los Spurs no vinieran arriba a empatar rápidamente. Pero al igual que Arsenal hace un mes, sus vecinos del norte de Londres parece que se quedaron también en Euston Road, estando desaparecidos en todo momento. Tampoco la suerte acompañó a la expedición blanca, pues Vertonghen tuvo que abandonar el campo por lesión pasados los 10 minutos de juego.

Luis Suárez II a.k.a. "El hambriento"
Liverpool dominaba posesión, ante un Tottenham devastado, sin ideas y totalmente perdido. Y la defensa spur colaboró en nuestra empresa, regalando a Suárez un balón que acabó en las mallas, aumentando la ventaja a 2 goles. Hasta pudo llegar a marcar un segundo gol si no fuera por una brillante parada de Lloris, que también rebotó en la madera (para variar). Más adelante, ya en la segunda parte, Coutinho marcó (sí, han leído bien) un excelente gol desde fuera del área, culminando un partidazo del brasileño. Jordan Henderson finalizó con el resultado final de 4-0 al botar una falta en la que pudieron marcar otros 3. Volviendo a Suárez, el charrúa ya lleva 29 goles en la competición, y superó los 28 de Fowler en 1996, quedando 6 partidos aún para el final de la Premier League. Ayer Luis no fue el mismo que en otros partidos, donde volvía loco a las defensas con regates imposibles. Sin embargo, a un delantero no se le requiere tal habilidad, sino la de marcar cada ocasión que tenga. Y tanto Sturridge (que tampoco hizo nada ayer) como él, saben hacerlo mejor que nadie. Ganamos 4-0 sin necesitarles. ¿Hay algo mejor?

Sterling y Johnson. Enorme partido ayer de ambos
Por otro lado, no puedo dejar pasar la enorme (una vez más) actuación de nuestros auténticos Golden Boys. Raheem Sterling no batió a Lloris, aunque fue todo un dolor de cabeza para los laterales de Tottenham. Incluso en algún momento me llegó a parecer hasta a Iniesta (¡alerta de exageración!) con ciertos cambios de ritmo y juego de espalda que llevó a cabo nuestro extremo. Souness incluso afirmó en la retransmisión que Raheem será uno de los mejores jugadores del mundo en el futuro. Quizá aún es muy pronto para decirlo, pero el camino lo está haciendo. Finalmente, debo quitarme el sombrero nuevamente con el partidazo de Flanagan. No cabe duda de que es una perla de nuestra cantera, que ya vio Dalglish y que Rodgers está puliendo con maestría. La seguridad mostrada por este chaval de 21 años es impresionante, consiguiendo adaptarse al lateral izquierdo como si hubiera nacido ahí mismo. Las palabras del mismo Cafú por Twitter son un importante testigo del progreso que Jon está teniendo durante esta temporada, sumándose a la moción para conocer a Flanagan como "RedCafu". Hoy en día, Flanno es pieza clave del sistema de Rodgers, algo que no es fácil tratándose de un jugador sin experiencia de una temporada completa al más alto nivel y estando en un equipo líder de liga a falta de 6 jornadas para el final.




Y para terminar... lo inevitable. Las preguntas protocolarias de estas fechas.

  • ¿Ganaremos la Premier League?
Con la esperanza de continuar siguiendo los pasos de Nostrapacus (para los que no me sigáis en Twitter, tengo la excelente habilidad de pronosticar algo, y pasar completamente lo contrario), pienso con total seguridad que no la ganaremos. En todos nuestros partidos restantes nos enfrentamos a clubes que se juegan algo, ya sea descenso o título, a excepción de Newcastle en la última jornada, que se supone que incluso en estos momentos no se van a jugar nada de nada.
  • ¿Significa ésto que no confíe en el Liverpool?
¡Para nada! Simplemente creo que tanto Chelsea como City están mucho más preparados para el título que nosotros, y juegan con esa importantísima ventaja. Ambos deben pasar por Anfield aún, por lo que, como dije antes, la Premier League depende 100% de nosotros.

  • ¿Confiaré en algún momento en el título?
Seguramente si ganamos en Boleyn Ground (donde pelean por no descender) y en Anfield ante City. Ambos partidos son los más importantes de la temporada, y marcarán si realmente somos auténticos candidatos a la Premier League. Si seguimos líderes en 2 semanas, habiendo conseguido 6 puntos para entonces, mi confianza por el título será inmensa y esa precaución en la que me mantengo podría desaparecer.

Independientemente de si ganamos la Liga (que sería la más sorprendente desde que Leeds se alzara con ella en 1992) o no, hemos de alabar y aplaudir a nuestros jugadores y a nuestro entrenador, pase lo que pase. No podemos crucificarles si se da el segundo caso. Creo que hablo por todos los kopites cuando digo que nadie, absolutamente nadie, esperaba por agosto que estuviéramos liderando la Premier League en la primera semana de abril. Servidor, y millones de fans reds pensábamos que el objetivo era regresar a Champions, y luego ya se vería. Y por lo que estamos viendo, la clasificación está prácticamente conseguida, y el 3er puesto casi afianzado. Sin embargo, con el liderato, parece demasiado conformista pensar que debemos asegurar dicha tercera plaza. En estos momentos peleamos por el título, pero de quedar terceros, no hemos de echarnos las manos a la cabeza. El trabajo de Rodgers y de los muchachos ha sido innombrable durante toda la temporada, y se han ganado a pulso todo nuestro corazón. Y todavía tienen 6 partidos más, 540 minutos más, para seguir permitiéndonos soñar. ¡Podemos!


 #MakeUsDream

jueves, 27 de marzo de 2014

Captain Fantastic al rescate

Creo que tras todos estos años en los que Steven Gerrard ha formado parte del primer equipo del Liverpool, ningún kopite ha dejado de admirar al capitán en algún momento, teniendo lugar todo lo contrario. No hay duda de que Gerrard es uno de los mejores jugadores de la historia del club, a pesar de no haber conseguido (aún) ningún título de Liga, y así lo demostraron los fans votándole en 2º lugar en la clasificación de "100 players who shook the Kop" de 2006 (la version de 2013 no tiene demasiada validez para mí, al llenarse de fans que desconocen gran parte de la historia Red).

Captain Fantastic!
Si bien es cierto que nuestro capitán tuvo su momento de duda acerca del compromiso que mantenía con el club allá por 2005, la Champions League que conseguimos ganar frenó sus pequeñas (sólo pequeñas) ganas de cambiar de aires y probar suerte ganando títulos dinero en Chelsea. Por suerte, llevamos a casa aquella "orejona" y pudieron aconsejar bien a un capitán un tanto inexperimentado en el cargo. Y conforme las temporadas iban pasando, el papel de Gerrard en el club no sólo se quedaba sobre el terreno de juego. Ser el capitán del Liverpool no es ninguna tontería, y requiere de un compromiso innegable y de respetar los valores que han hecho de nuestro equipo, uno de los mejores clubs de la historia del fútbol. Steven se pegó una hostia a sí mismo (metafóricamente hablando) en aquel 2005, dejándose de tonterías y cumpliendo su labor con el Liverpool para el resto de su vida. Y muy pocos jugadores actualmente son capaces de hacerlo, al caer en la tentación del dinero.

Pueden pasar los años, que Steven seguirá siendo el jefe del mediocampo del Liverpool temporada tras temporada. Durante la primera mitad de la actual tuve mis dudas acerca del papel del capitán en el primer equipo. Se le veía muerto, sin esa creación de juego a la que nos tenía acostumbrado hace años, incluso en ocasiones con falta de ánimo y ganas. Pero sólo ha servido el hecho de que estemos peleando la Liga para que el auténtico Gerrard haya salido a la luz. Un Gerrard que lidera mental y futbolísticamente a los otros 10 que están sobre el terreno. Un Gerrard feliz, con más ganas que nunca de hincarle el diente al título que más tiempo se nos lleva resistiendo. De entre los millones de seguidores Reds, nadie confía en ganar la Premier League de este año más que Steven Gerrard. Y cuando él confía, todos debemos hacerlo.

Gerrard ha elegido creer. ¿Quiénes somos el resto
de mortales para debatirlo?
No pude evitar durante el partido de anoche comparar la celebración del gol de nuestro capitán con las del resto de partidos de la temporada (incluidos los 2 goles ante Manchester United en Old Trafford). En un partido a priori sencillo, no había manera de adentrarse en la poblada defensa de Sunderland, que pelean por no descender. Incluso los Black Cats parecían querer venirse arriba, sin grandes ocasiones de peligro durante la primera parte. Y ahí apareció Gerrard, con un excelentísimo golpeo de falta (que Mannone también se comió un poquito) que causó el delirio de la grada de Anfield y la del propio Steven, que gritó como nunca este gol, puede que por el hecho de no ser de penalti, como suele hacer últimamente. Pero esa celebración demostró al mundo entero que él no está "muerto" para nada, y que seguimos en la pelea por la Liga. Que cualquier partido, por muy fácil que sea en apariencia, cuenta igual o más que cualquier otro a estas alturas de la competición. Gerrard sabe de la importancia de conseguir puntos en la recta final de la Liga y, aunque ésta no depende 100% de nosotros, debemos continuar metiendo presión a los otros 2 aspirantes, contra los que incluso jugaremos en Anfield en futuras fechas.

Al igual que en Villa Park en 2007, Gerrard salió a nuestro rescate
con un enorme disparo de falta.
Una pancarta en The Kop anoche decía que "todo es posible para aquellos que creen". La grada de Anfield ha preferido creer, y así lo demostró anoche, con un espectacular recibimiento al autobús del equipo en su llegada a Anfield, y con un ambiente digno de las mejores noches europeas. Seguiré repitiendo que personalmente prefiero pensar que no ganaremos la Liga, para evitar una hostia enorme si no la conseguimos, aunque he de reconocer que cada día voy convirtiéndome un poquito más en creyente. Y no porque vea que la grada, Gerrard y el resto de jugadores y cuerpo técnico hayan elegido serlo, sino porque mi confianza en Brendan Rodgers es infinita, a pesar del pobre planteamiento de los úlltimos minutos de anoche. Nuestro entrenador ha sabido aplicar los valores del club a sus métodos y no pueden hacer otra cosa más que funcionar. Cogió a un equipo prácticamente roto y lo ha arreglado con paciencia, dedicación y esfuerzo. Hasta me gustaría ver qué piensan ahora todos aquellos "fans de reciente entrada" que se pasaron toda la temporada pasada refugiándose en el fácil "Rodgers Out". La paciencia y el tiempo le han dado la razón.

The Kop como en sus mejores días
Por otro lado, refiriéndome más al partido de anoche, he de mostrar una pequeña preocupación. Si bien es cierto que Sunderland está jugándose la vida y que para nada iba a ser un partido sencillo, me preocupa muchísimo ciertos planteamientos que Rodgers tiende a adoptar cuando ganamos por 2 goles cerca del final. Con esa diferencia, un partido jamás está decidido, y por suerte, pocas de nuestras victorias esta temporada están siendo de ese estilo, sino incluso por más goles. Pero anoche se dio la situación, y Sunderland, ante la más que notoria relajación de nuestros muchachos, se quiso venir arriba, marcando un gol y perdonando unos cuantos más. En una situación cómo la de anoche, el partido se debe matar jugando con la posesión, perdiendo todo el tiempo posible, y no mandando balonazos para buscar a Suárez y ver qué inventa, especialmente cuando Sturridge no está sobre el campo y Sterling está más preocupado por defender que por atacar. Salimos victoriosos, pero estuvimos a nada de perder 2 puntos en casa valiosísimos para seguir en la lucha. Mi sufrimiento en los últimos 10 minutos fue digno de los años con Benítez, y casi ni lo recordaba. Espero que Rodgers se diera cuenta del peligro al que estuvimos expuestos y consiga evitarlo en próximas fechas.

Brendan, confiamos en ti, pero no nos vuelvas
a hacer lo de anoche
Sólo nos encontramos a un punto del líder (Chelsea) y estaríamos a 4 de Man City si logra ganar sus 2 partidos pendientes. Por atrás, Arsenal ya está a 5 puntos, y no tiene para nada fija su plaza en Champions, pues Everton viene fuerte por detrás. Es vital asegurar el 3er puesto y entrar directamente en fase de grupos de Champions League, al disponer de un Ranking UEFA de mierda muy pobre debido a nuestros últimos años por el desierto. Estamos muy cerca de volver a Europa, y además de un título que no conseguimos desde 1990. El partido de este domingo en casa contra Tottenham debe ser un nuevo golpe sobre la mesa y ha de suponer más presión para los clubes hechos con dinero contra los que peleamos. A partir de ahora, cualquier punto que perdamos es un disparo que recibimos. Gerrard sabe de la importancia de este hecho, y no hay nadie mejor que él para liderar nuestra expedición en busca del arca perdida título de Liga.

#MakeUsDream

lunes, 17 de marzo de 2014

Showtime en el Teatro de los Sueños

Hoy seré bastante breve en la entrada de mi blog, a pesar de lo acontecido ayer. San Patricio sólo es un día al año y las Fallas hay que aprovecharlas bien. Pero no puedo dejar pasar lo que vivimos en Old Trafford, hace aproximadamente 24 horas.

So beautiful...
La humillación a la que sometimos al Manchester United en su propio campo era prácticamente una crónica de una muerte anunciada. Personalmente, yo era bastante optimista de cara al encuentro de ayer, pero no me esperaba un dominio de la dimensión que tuvo lugar. Aunque empezamos bastante dubitativos, poco a poco fuimos adquierendo control del balón. Sin embargo, no llegaban ocasiones para ninguno de los dos conjuntos. Hasta que llegó el penalti de Rafael, quien evitó una jugada de peligro de Luis Suárez con la mano. Mark Clattenburg se convirtió en protagonista (en cierta medida) al no expulsar al jugador brasileño, quien ya tenía tarjeta amarilla por una entrada salvaje sobre Gerrard unos minutos atrás. Fue el propio capitán el que ejecutó la pena máxima, adelantándonos no muy lejos del descanso, silenciando a toda la grada del Man Utd.

Sabias palabras (como casi siempre) del Rey.
El segundo tiempo empezó prácticamente como el primero, al provocar Vidic un nuevo penalti nada más reanudarse el juego. Captain Fantastic resolvió nuevamente para llevar a cabo su celebración de rigor, besando la cámara de Sky Sports por tercera vez en el Teatro de los Sueños. Incluso Steven tuvo un tercer penalti más adelante, el cual lanzó contra el poste, privando a nuestro líder de un hat-trick en territorio hostil. Ese último penalti además provocó la expulsión de Vidic (tantas coincidencias...), dejando a unos tristísimos Red Devils (que hicieron como 10 penaltis fácilmente) con un jugador menos, ante un rival infinitamente superior. Con el Liverpool más relajado, llegó una grandísima ocasión de Suárez, que fue repelida a bocajarro por De Gea de forma extraordinaria. A pesar de ello, el propio delantero charrúa batió al portero Devil, cerrando el marcador.

Mata Who? FLANAGAN, el lateral desubicado
Refiriéndome al rendimiento de nuestros jugadores, he de destacar por encima de todos al auténtico Golden Boy de esta edición de Premier League, por encima incluso de Sterling, y muuuy superior a Bojan 2.0 Januzaj. El PAR-TI-DA-ZO que se marcó ayer Jon Flanagan fue apoteósico. Fue uno de los más grandes del Super Sunday, liderando tanto el ataque como la defensa por las bandas del Liverpool, haciendo entradas sobre Rafael como si de un veterano se tratara. Hemos de recordar que Flanno es lateral derecho natural, teniendo que jugar ayer en banda contraria. Por otro lado, Gerrard y Allen fueron dueños y señores del mediocampo, acompañado de un excelente trabajo defensivo por parte de Agger, Skrtel y Mignolet, quien realizó una excelentísima parada a Rooney con el 0-1. Sturridge y Suárez no destacaron demasiado. No fue necesario que se salieran, aunque Luis lo intentó con muchas más ganas.

Sólo 2 situaciones provocan esta cara de Ferguson: la
derrota de ayer y quedarse sin Whisky un domingo por
la mañana
Este estupendo resultado, aparte de considerarse una humillación a nuestro mayor rival en su propio campo, supone que nos mantengamos en plena lucha por la Premier League. Chelsea perdió su partido en Birmingham, por lo que nos pondríamos a un punto del actual líder si conseguimos ganar el encuentro que nos falta. Por otro lado, Arsenal venció por la mínima en el derby del norte de Londres, por lo que podríamos aumentar la ventaja sobre Tottenham (5º puesto) hasta 12 puntos, suponiendo la victoria en el partido de menos que tenemos. Con media clasificación a Champions League asegurada, Gerrard y Rodgers apuntan que somos claros contendientes para luchar por la Liga. Si ganamos TODOS los partidos que tenemos (incluyendo Chelsea, City y Tottenham en Anfield), la Premier League podría ser nuestra. Muy complicada empresa, pero con mucha confianza a nuestras espaldas. La victoria de ayer nos convierte en luchadores por el título, aunque como sabreís, sigo prefiriendo ser bastante precavido.


viernes, 14 de marzo de 2014

Mientras tanto, hace 5 años...

La situación actual del Liverpool es privilegiada, teniendo en cuenta nuestra actuación en los últimos 23 años. No ganamos una Liga desde 1990 y sólo conseguimos terminar en 2º puesto en 2 ocasiones (2002 y 2009). Incluso desde 1991, cuya temporada comenzó Dalglish para dejar su sitio a Souness, nunca hemos tenido tantos puntos tras 28 partidos como este año, 59 exactamente, 1 más que en 2009 con Benítez. Precisamente aquel fue nuestro último gran año, que dio paso a nuestra época más oscura de los últimos tiempos.

Souness tiene el dudoso honor de ser el entrenador del peor Liverpool
de los últimos 50 años. La temporada de Hdogson la salvó King Kenny
Tal día como hoy por la mañana (14 de marzo) en 2009, ya nos encontrábamos en tercer puesto, tras un genial comienzo de temporada, empatados a puntos con Chelsea y a 7 puntos de Manchester United (que tenía un partido menos). Los numerosos empates sufridos aquella campaña ante rivales completamente inferiores, como Hull, Fulham o Stoke, frenaron los 26 puntos conseguidos en las primeras 10 jornadas. Sin embargo, Aston Villa (que aquellos años lo petaba, dentro de lo que cabe) estaba a 6 pts, y con pocas opciones de avanzar mucho más. Tal día como hoy de aquel año seguíamos eufóricos, celebrando el pase a cuartos de final de Champions League 4 días antes, dándole un auténtico baño al Real Madrid en Anfield, partido que ha quedado conocido para la posteridad como el "partido del chorreo". Tal día como hoy hace 5 años, nos presentamos en Old Trafford, con la obligación de privar al Manchester United de la victoria y mantener vivas nuestras opciones de soñar con el título.

Epic fail de Marca feat. Vicente Boluda
La empresa, como se ha de suponer, era bastante complicada, a pesar de que ganamos a Chelsea los 2 partidos (que no conseguíamos desde los años 80, si no me equivoco) y que nuestra versión ante los grandes era bastante mejor que contra los más humildes. Por otro lado, durante aquellas semanas tuvo lugar el famosísimo duelo de declaraciones entre Benítez y Ferguson (quien, por desgracia, fue claro ganador). Con la moral por las nubes por el resultado europeo y con una plantilla totalmente preparada para el asalto a la Premier, llegamos a Manchester con más ganas que nunca de robar algún punto en territorio hostil. Pero el partido no pudo comenzar peor, al cometer Reina un penalti sobre Park Ji Sung a los 23 minutos, el cual culminó Cristiano Ronaldo. Nuevamente, todo parecía indicar que saldríamos de Old Trafford tal como llegamos, y que se perdería la moral conseguida ante el Madrid. Pero eso sólo significó el auténtico comienzo del partido para el Liverpool.

Auténtica imagen para el recuerdo
Ni 5 minutos pasaron desde el gol del portugueshh cuando Torres aprovechó una empanada del siempre sobrevalorado Nemanja Vidic para adentrarse en solitario en área devil y batir a Van der Sar. En esos años, gozábamos la suerte de que la Premier League era retransmitida los sábados a mediodía por TVE, y en cada ocasión que tenían televisaban un partido del LFC (algo positivo debía tener el infame "Spanish Liverpool"). Aquel gol de Torres sirvió para que Petón se saltara a la torera su supuesta imparcialidad y gritara el gol a pleno pulmón. Ahí volvía a empezar todo de 0, pero con peor resultado para United, que ya se las veía muy felices con el primer (y a la postre, único) gol. Porque el resto del encuentro fue un auténtico dominio Red, que se puso por delante al borde del descanso gracias a un gol de penalti de (quién si no) Steven Gerrard. Su celebración besando a la cámara de Sky Sports es, desde entonces, un símbolo para todos los kopites, siendo recordada en cada visita al estadio de las afueras de la capital mancunian. Incluso lo repitió 2 años después al empatar en el mismo escenario. Conseguimos remontarle al United en su campo, y con un gol casi en el descanso. ¿Se podía pedir más?


Respondiéndome yo sólo, he decir que sí. En una segunda parte en la que Manchester United jugaba con las caras largas y mirando hacia el suelo, Vidic cometió una falta al borde del área devil, lo cual supuso su segunda amarilla y dejó a su equipo con 10 jugadores, redondeando todo un "partidus horribilis" del central serbio. Dicha falta fue fabulosamente rematada por Fabio "hombre de cristal" Aurelio. Con un 1-3 faltando poco más de 10 minutos parecía que estaba todo el pescado vendido. Pero faltaba el invitado de lujo...

Nuestra última victoria en Old Trafford fue con Dossena
con nosotros sobre el campo. ¿Casualidad? No lo creo.
En este momento debo remontarme a los primeros meses de competición. Benítez se sacó de la manga en julio un lateral izquierdo italiano procedente de Udinese que pudiera suplir la marcha de Riise a la Roma, y que atendía al nombre de Andrea Dossena. Con el paso de las semanas, sólo conseguía ver del italiano partidos más bien pobres, con unos centros terribles y muy poca aportación, tanto ofensiva como defensiva (algo similar a lo que sucede con José Enrique). Incluso el propio Dossena reconoció la dificultad que le conllevó adaptarse al fútbol inglés. La gran sorpresa llegó en el partido de 4 días atrás, cuando cerró el 4-0 ante el Madrid, provocando la sorpresa y carcajadas de la parroquia red. Al parecer, el bueno de Andrea estaba totalmente ON FIRE, y quería aprovechar dicha situación. Cuando menos se lo esperaba todo el mundo, devils y reds, en el minuto 90, Dossena dio rienda suelta a su calidad al marcar todo un gol de volea por encima de un adelantado Van der Sar, quien miró el balón en su portería con auténtica cara de Yao Ming. En lo personal, estoy seguro de que mis gritos con cada gol llegaron hasta Marruecos. Pasarán los años, pero jamás disfrutaremos de una semana tan magnífica como aquella, que hasta hoy es la última victoria Red en el Teatro de los Sueños. En 2010 estuvimos cerca de remontar (un partidazo de Berbatov lo evitó) y unos meses después en FA Cup nos volvimos a topar con Howard Webb.


En la parte inferior izquierda se puede apreciar como
Albert Riera ni se cree que el gol haya sido de Dossena
La humillación quedó bien reflejada en el marcador de Old Trafford. Benítez arrolló a Ferguson, que ni se atrevió a atender a los medios una vez finalizado el encuentro, dejándole el testigo a Mike Phelan, su asistente, al más puro estilo Mourinho-Karanka. Por desgracia, y a pesar de ganar todos los partidos restantes a excepción del mítico 4-4 contra Arshavin Arsenal, Manchester United encontró en Federico Macheda a su "héroe" (como ahora es Januzaj), con goles in extremis en los últimos minutos, y acabó cediendo menos puntos de los esperados, consiguiendo igualarnos con su 18º título de liga. Por cierto, Macheda actualmente es objeto de cesiones a equipos de Championship. Un auténtico top class.

Inolvidable fotografía, a la espera de una versión 2.0
Sólo 4 puntos nos separaron de acabar con una espera de 19 años, siendo de 24 a día de hoy. Este domingo asaltamos Old Trafford ante un Manchester United sumido en la duda, con un entrenador en entredicho y que ha de depender en multitud de ocasiones de un nuevo supuesto Golden Boy y de Chicharito, que en mi opinión es el jugador que todo equipo querría tener, al marcar los goles más llenos de potra y en el peor momento de toda la historia del fútbol. En cambio, nosotros tenemos la mejor delantera del mundo actualmente y somos más que capaces de volver a dejar de vacío al Man Utd en su propia casa. Ésta es una grandísima oportunidad. Confío como nadie en Brendan Rodgers desde que llegó, y aunque prefiera ser muy precavido por lo menos esta temporada (como ya dije en mi entrada anterior), estoy convencido de que él será el hombre que haga terminar de una vez por todas con esa larga espera.

martes, 11 de marzo de 2014

Y ahora viene lo mejor

No, no me he olvidado del blog. Mis numerosos quereseres me han privado de dedicarle tiempo al mismo, así como que no pude ver el último encuentro del Liverpool, hace poco más de una semana en Southampton.

Pancarta preparada por Travelling Kop para
el partido del próximo domingo
Y ha coincidido este parón de mi blog con el del club, que se ha tomado esta semana de descanso para afrontar el próximo domingo una batalla que dará comienzo a la parte más dura de la competición. El Liverpool se traslada a Old Trafford para tratar de afianzar su lucha por el título por la clasificación a Champions League, y de paso para intentar sumir en un mayor mar de dudas a la grada de los devils, quienes tienen marcado a David Moyes con una cruz desde hace meses. En la zona roja de Manchester no le tragan, mientras que en Liverpool todos celebran su descalabro. Sin embargo, para un servidor, no le parece que el escocés lo esté haciendo tan mal, excepto a la hora de renovar su equipo. David eligió mantener el bloque dejado por Ferguson, con un nivel de media tabla y con una gran necesidad de renovación. Tan sólo añadió a su plantilla a su viejo conocido Fellaini (por mucho más dinero del que realmente vale) y a Mata. En mi opinión, el United está haciendo muy buena campaña atendiendo a la calidad de sus jugadores, quienes ganaban títulos gracias a que Ferguson era un excelente motivador y un genial táctico (tanto dentro como fuera del campo). En Manchester no están acostumbrados a no ganar, y la paciencia es una virtud.

Como dijo Schuster: nada más que desir
Atendiendo a los nuestros, llegamos al partido en un grandísimo momento. Actualmente somos segundos, a 4 puntos de Chelsea (con quien jugamos en casa en la antepenúltima jornada) y tras ganar 0-3 en un campo tan complicado como el de Southampton. Sturridge además no se ha tomado tan de fiesta la última semana libre, ya que también mojó con Inglaterra en el amistoso del pasado miércoles ante Dinamarca. En mi anterior entrada ya comenté que Sturridge es nuestro seguro y que, para mí, es el fichaje más importante junto a Suárez de los últimos 6 años. Por otro lado, están a punto de volver Sakho y Lucas de sus respectivas lesiones, lo que amplía el rango de posibilidades de Rodgers para formar su plantilla de cara a próximos encuentros. Eso junto a que nuestros delanteros están en la mejor forma, y no hay partido en que alguno de los dos no enchufe. Nuestra confianza no puede ser más alta... pero no hemos de dejarnos llevar por la emoción.

Leo por distintas webs y redes sociales a numerosos kopites insinuando el título del Liverpool para esta temporada de Premier League. No habría otra cosa que me hiciera más ilusión, al ser el único trofeo que no he visto jamás levantar a un jugador del Liverpool. La última liga para los reds fue 6 meses antes de mi nacimiento (GAFE ALERT!!1!), por lo que mi deseo por que ganemos esta competición ha alcanzado niveles insuperables. A pesar de ello, la experiencia (tanto futbolística como fuera de ella) me ha enseñado a tener los pies en el suelo en todo momento. Es cierto que gozamos de una situación incluso mejor que la de 2009, pero a diferencia de aquel año (cuando peleamos sólo contra Man Utd), hay otros 2 equipazos con un presupuesto estelar y en una forma excelente, que rara vez ceden puntos. Personalmente, creo que esta Premier League es cosa de Manchester City y Chelsea. Incluso no vendría mal que se pelearan entre ellos dos, tratando de llegar nosotros por detrás, por si cuela y tal... De Arsenal me olvido. Ya han comenzado a ceder puntos, y aunque no soy adivino, les preveo un dificilísimo final de temporada.

¡Que se peguen! ¡Que se peguen!
Dice una estadística (en las cuales no confío al 100%, aunque siempre son curiosas) que ningún equipo ha ganado la EPL sin haber quedado más atrás del 3er puesto el año anterior. Tampoco pienso en refugiarme en ello. ¿Por qué no podemos romper nosotros dicha estadística? No hay ninguna norma que prive a clubes que terminan séptimos ganar la Liga del año siguiente. Pero no soy Brian Clough, así que me basaré en aquello de que "Roma no se construyó en un día". El primer paso debe ser volver a Champions, recuperar prestigio en la mejor competición a nivel de clubes del mundo. Y después llegará el dominio. Puede que vosotros, mis lectores (escasos, por el momento), penséis que soy un conformista. Prefiero que penséis que soy muy precavido, y que no quiero dejarme llevar por la euforia. Si ganamos el título será un alegrón impresionante. Si no lo hacemos, la hostia no es tan grande.

Rodgers y Dalglish, mirando cómo va Man United
en la clasificación
Quedan 10 jornadas de Liga, y estamos en una situación privilegiada, que muchos casi ni hemos vivido, a excepción de aquel penúltimo año de Benítez. Entre nuestras próximas citas, tras la de Man United, aún falta jugar contra Cardiff*, Sunderland, Tottenham, West Ham*, Man City, Norwich*, Chelsea, Palace* y Newcastle. Visto a día de hoy, es un calendario bastante jodido, ya que todos se juegan algo (clasificación a Europa, Liga o descenso). Nunca he sido muy de preveer puntos y demás, pero esta vez haré una excepción, dada la situación. Suponiendo nuestra lucha por el 3er puesto contra Arsenal (mi opinión), ellos aún tienen que jugar contra Bayern (UCL) y Tottenham esta semana, Chelsea, Man City, Everton y semis de FA Cup, entre otros, con una plantilla más corta que el cespet del Camp Nou. No puedo ser más optimista para pensar que la tercera plaza ha de ser nuestra como mínimo. Y Spurs (en zona Europa League) pueden ponerse a 9 puntos de nosotros si ganamos este fin de semana. Not bad at all.

La primera batalla llega el próximo domingo, 16 de marzo. 2 días después de cumplirse 5 años del famosísimo 1-4 con el que arrollamos a los muchachos de Ferguson, y del que escribiré el viernes, si mi tiempo me lo permite. Con nuestra gran forma y el rendimiento de Man United, es la mejor ocasión para conmemorar el partido de 2009. Suárez y Sturridge quieren sangre y nadie se motiva como Gerrard en este encuentro. ¡Podemos!

#NeverForget
Y para terminar... ¡me voy a mojar!

1 - Chelsea
2 - Manchester City
3 - Liverpool
4 - Arsenal
5 - Manchester United
6 - Tottenham
7 - Everton

*Partidos fuera de casa